En primer lugar, es importante reconocer que la envidia es un sentimiento ‘natural’ en el ser humano que nace del sistema de creencias del ego.
Esencialmente, el ego acepta la posibilidad de la existencia de la carencia, la necesidad de la competitividad y la escasez.
Sin embargo, es posible superarla o al menos apaciguarla si la miramos desde un punto de vista espiritual. Por ello, en este artículo descubrirás cómo superar la envidia desde una perspectiva espiritual.
Índice del artículo
¿Qué es la envidia?
La envidia es un sentimiento o estado mental de tristeza, desdicha o enojo por no poseer, ya sea cualidades o bienes materiales, o hacer lo que otra persona posee o hace.
El origen de la envidia.
Sin duda alguna, si analizamos el concepto de la palabra envidia, notaremos que el origen de ese sentimiento es la creencia en la carencia, en la competitividad y en la escasez.
La envidia y la creencia en la carencia.
Indiscutiblemente, la persona que sufre de envidia tiene la creencia de que ya no podrá experimentar su objeto de deseo porque otra persona lo tomó antes que ella.
En consecuencia, es como si en toda la vida y en todo el planeta los recursos estuvieran limitados a una sola persona y si una persona toma de esos recursos antes que ella, ya no podrá experimentarlos en toda su existencia.
La envidia y la creencia en la necesidad de la competitividad y en la escasez.
También, la envidia nace de la creencia en la necesidad de la competitividad. Del mismo modo, la competitividad surge de la creencia sobre la posibilidad de la escasez, razón por la cual, debemos ser los primeros en posicionarnos antes de que ‘otros lo tomen y nos quiten la posibilidad de disfrutarlo’.
El ser humano y el sistema de creencias del ego.
Para saber cómo superar la envidia desde una perspectiva espiritual, es necesario conocer la esencia de la persona tanto como ser humano y como ser divino.
Básicamente, como ser humano, tenemos el condicionamiento de creencias del ego que se basa esencialmente en la ‘protección’ de la supervivencia, razón por la cual cree en la carencia, en la necesidad de la competitividad y la escasez.
Importancia de la toma de consciencia para superar la envidia.
Si no tomamos consciencia acerca de la procedencia de nuestras emociones y sentimientos y reaccionamos ante ellos inconscientemente, estaríamos entregando el rumbo de nuestra vida a un condicionamiento obsoleto y primitivo, como lo es el ego.
Por esto mismo, se debe tener presente que el ego solo se enfoca en los posibles ‘peligros’ que muchos de ellos son meramente imaginarios.
Asimismo, limita al ser humano a expandirse más allá de sus fronteras mentales y condiciona su vida a lo conocido y habitual, impidiéndole experimentar nuevas sensaciones.
La importancia de la perspectiva espiritual para aprender cómo superar la envidia.
A menos que permitamos una mirada espiritual, estaríamos sumidos a los límites mentales del ego y sus creencias en la necesidad de ‘quitar’ al otro aquello que nosotros deseamos, porque ‘correríamos el riesgo’ de no poseerlo.
Igualmente, es importante tomar en cuenta el origen divino o espiritual del ser humano y del universo en el que habita.
El ser humano desde un punto de vista espiritual.
Definitivamente, sería mucho más fácil presenciar cómo otro ser humano disfruta de algo que a nosotros también nos gustaría, si tenemos presente que somos almas encarnadas en este planeta para experimentar ciertas experiencias previamente planificadas.
Como resultado, al ser conscientes que la esencia divina de la cual procedemos y también todo el universo es Amor puro, ya no ‘temeríamos’ perder nuestro objeto de deseo simplemente porque alguien más ya lo está disfrutando antes que nosotros.
El plan perfecto del alma.
Además, es una realidad que el alma tiene un plan perfecto que vino a cumplir en esta encarnación y en él está que vivamos ciertas experiencias o tengamos determinados bienes materiales, lo lograremos sin importar que otros lo obtengan antes que nosotros.
Cómo superar la envidia desde una perspectiva espiritual.
Por consiguiente, una manera de superar la envidia es siendo conscientes de nuestra condición humana sin perder de vista nuestra procedencia divina.
También, otra forma es utilizando a la envidia como un recordatorio de aquello que deseamos experimentar pero que, debido a diferentes factores no le hemos prestado la debida atención para materializarlo.
Por esto mismo, cada vez que la envidia aseche, conéctate con la abundancia infinita del universo y ya no temerás ‘perder’ o ‘quedarte fuera’ de experimentar aquello que anhelas.
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