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El verdadero propósito de tener una pareja.
El verdadero propósito de una relación no es llenar vacíos, sino expandir el alma.
La clave no es tener pareja por tenerla, como si se tratara de completar una lista de logros o encajar en las expectativas sociales. La verdadera clave está en elegir conscientemente a alguien que te inspire a ser la mejor versión de ti mismo.
Una pareja no está para rescatarte, ni para salvarte de tu soledad. No está para llenar tus vacíos ni para darte el amor que tú mismo no te estás dando. En lugar de enfocarte en «rellenar un vacío», piensa en encontrar a alguien que sea un complemento real a la vida plena que ya estás construyendo desde adentro.
Cómo elegir una pareja.
Lo que realmente importa no es tanto el hecho de tener pareja, sino elegir a alguien que sume a tu vida, que te impulse con su energía, que te inspire con su manera de ser y que te apoye en tu camino de crecimiento personal, espiritual y emocional.
Una relación sana no te encierra: te expande.
La importancia de transformarte en el amor de tu vida.
La pareja que manifiestes en tu realidad es sólo el reflejo de la relación de amor que tienes contigo mismo. Si no te eliges, si no te valoras, si no te amas de verdad, lo más probable es que atraigas relaciones que también reflejen ese abandono, esa inseguridad o esa necesidad de aprobación.
Por eso, es imprescindible que te conviertas en el amor de tu vida antes de salir a buscarlo afuera. Solo desde ahí podrás reconocer a alguien que te ame de verdad, porque sabrás cómo se siente ese amor cuando ya lo has cultivado dentro de ti.
Con la intención de apoyarte en tu proceso de transformación interna y de apertura al amor real, escribí este libro: Encuentros con el amor de tu vida.
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